De nuevo en
la Brecha
Por Manuel
Ángel Gil
"De nuevo en la brecha, amigos míos,
otra vez, o tapen la muralla con nuestros muertos ingleses. En la paz nada
conviene más a un hombre que la serena modestia y la humildad, pero si el
estallido de la guerra suena en los oídos, entonces hay que imitar la conducta
del tigre. Tensen los músculos, conjuren a la sangre, disfracen el buen
carácter con la furia de rasgos crueles, y luego den a los ojos un aspecto
terrible...”
Henry V. Tercer Acto, Escena I. William Shakespeare(1598)
Henry V. Tercer Acto, Escena I. William Shakespeare(1598)
Otras referencias : Visto para sentencia. Tests F1 conclusiones
Volver a empezar.(Circuito de Jerez, España. 9 de
febrero 2012. 9:16 am)
Nada puede igualar ese momento. Es algo inexplicable,
sin parangón, es como besar a tu recién nacido. Después de un duro invierno, te
ha crecido el pelo al estilo Matador del Rombo, y tienes un nuevo tatuaje. Tu peinado
es diametralmente opuesto al que luce Russel Crowe en “Gladiator”, pero tienes las
mismas ansias de apelar a la victoria que el general romano: “¡Fuerza y Honor!”.
Te enfundas tu “viejo” yelmo de carreras, azul y
gualda, y te preparas para la brega. Últimos ajuntes antes de entrar, con el
pie derecho por delante, como es tu costumbre. Los chicos te ajustan el
cinturón de 5 puntos, miras por los espejos y todo está en su sitio. Eres una
mancha azul en medio de un rojo océano.
Se comprueban los sistemas, y notas ese pequeño hormigueo
en el estómago ante lo que se te viene encima. Una nueva temporada pero un
mismo reto: ganar el mundial de F1. Este es el momento de la verdad, donde los
datos del CFC y del túnel de viento deben concordar con los de la pista. Nervios
por doquier, y un ligero temblor de manos.
Andrea Stella, tu ingeniero y amigo, te da las últimas
consignas, repitiéndote el uso de algunas funciones de los botones y el
protocolo de arranque. Se inicia la secuencia de ‘despegue’. Arrancan el motor,
se bajan los gatos, notas caer el peso del coche sobre el suelo y un liguero
latigazo donde se acaba tu espalda. Las suspensiones son duras como piedras. Se
abre el portón del box: aceleras, sueltas el embrague izquierdo y lo aguantas,
un poco más, un poco más… Ruge la marabunta y bañado en una lluvia de flashes
de relleno y ráfagas de obturador, sales campante hacia tu izquierda buscando tu
primer contacto con el asfalto.
Ese momento es tuyo, en la pista no tendrás
periodistas preguntando, ni ‘sacafotos’ de tres al cuarto, sólo estaréis la máquina
y tú, notando respirar a la ‘bestia’ en tus manos. Es lo que has estado
deseando todo este invierno, pero, la duda suprema te asalta: ¿cómo será de
bueno el F2012?
Estás en tu vuelta de instalación, hace frío, pero la
sensación de velocidad es única. No obstante, Felipe ya te ha avisado de que al
coche le cuesta salir de las curvas, él fue quien estreno el nuevo bólido rojo
y no puede dar gas cuando quiere porque la zaga es nerviosa. Así que un poco
aquí, un poco allá, das más gas del necesario (para una vuelta de instalación)
y el coche responde… responde tal y cómo te dice Felipe. Mal negocio. Aunque… pilotar
un F1 es siempre un privilegio. Sonrisas.
La pregunta del millón es: ¿dónde está Ferrari?
La ‘nueva’ (y
tercera) era Alonso/Ferrari ha comenzado. Volver a empezar: ¿será esta
la definitiva?¿Seguirá Vettel reinando a placer? ¿Será el nuevo Red Bull tan
bueno como lo pintan? ¿Está ocultando algo Ferrari, o el F2012 es un carricoche
de polos formuleros?
Sería
un error no pensar que Red Bull y McLaren parecen ir un paso por delante, pero
¿hasta qué punto el bajón de Ferrari es real? Lo curioso del asunto, es que
todos esos problemas de Ferrari son por deducciones a pie de pista de técnicos
y periodistas, de declaraciones de gente del equipo, como Fry o el propio
Alonso, pero en realidad, si miramos las tablas de tiempos, no aparecen tales
problemas. En ninguna de las tablas de tiempos, simulaciones de carrera, o
stints, he visto a los Red Bull tan bien como todos los analistas señalan, o
mucho mejor que Ferrari o McLaren. Ni siquiera a una vuelta parecen la sombra
de lo que eran. Se trata más bien de una cuestión de fe en Newey. No obstante,
la fiabilidad de los chicos de la latas
con alas, ha dejado mucho que desear, y han roto hasta 3 cajas de cambios, así
que igual nos encontramos con una sorpresa en esta primera carrera.
Evidentemente,
el Ferrari también tiene sus problemas. El principal achaque del F2012 es que
no tiene suficiente carga aerodinámica detrás, por eso es nervioso a la salida
de las curvas y el consiguiente zigzagueo hace que destroce sus neumáticos.
Pero, ¿eso no quedaría explicado si el monoplaza cargara más gasolina de la
cuenta? Efectivamente, un coche excesivamente cargado puede hacer eso, ser muy
nervioso en el paso de curva, con una difícil manipulación de la masa dinámica
del coche. Pero, por la misma razón, también podrían ir cargado los demás, ¿verdad?
Pero
si hay algo que me desconcierta, son las últimas declaraciones de Domenicalli: "no estoy contento con el coche porque no
hemos cumplido el objetivo establecido, no porque seamos más lentos que
los demás”. En
realidad, concuerdan con lo dicho hasta ahora, el Ferrari no parece tan malo
como nos quieren dejar ver algunos. No son lo rápidos que esperaban, pero no
son lentos, ¡ojo! Lo que más ha mareado a los observadores es esa cantidad de
pruebas de velocidad constante en recta, algo que se hace al principio de los
test para comprobar datos y puntualmente cuando hay algún problema. La cuestión
es si Ferrari esconde algo y el lobo se ha vestido con piel de cordero. La conclusión parece clara, no están donde
quieren pero quizás son más rápidos de lo que creemos.
El Albert Park es rápido, resbaladizo y traicionero
Australia es diferente; y demasiado rápida para una pista
urbana. Lo suficientemente complicada para que los rookies pierdan el hilo sin
ningún tipo de problemas. Este es un circuito freno-gas. Fuertes frenadas, y
escasas oportunidades de adelantamiento, si acaso apretar por las curvas 1 y 2
para tener tu oportunidad en la 3. Una combinación de curvas lentas donde la
citada estabilidad en frenada, y la tracción lo son todo. Las zonas de escape
son mínimas y están llenas de puzolana de colores.
No es raro ver trompos por doquier, sobre todo los
novatos; el producto de un circuito polvoriento y con escaso agarre pero
demasiado rápido para ser urbano. El viernes la pista estará más verde que una
manzana (verde), así que encontrar los reglajes adecuados será complicado hasta la sesión del sábado.
Habrá que estar atento a la evolución de la pista y de su asfalto liso y
resbaladizo. Conforme se deposite la goma, el subviraje será la estrella del
momento y ese molesto granulado que puede aparecer en tus neumáticos no será
recomendable para afrontar la carrera.
Gomas más blandas y más espectáculo
Este año Pirelli ha apostado por unas gomas con una
durabilidad menor. Mientras el año pasado trajo el duro y el blando, este año
ha traído el medio y el blando, con la particularidad de que el medio de este año es similar al
blando del año pasado. Eso quiere decir que habrá bastante desgaste de neumáticos,
lo que será una cruz para Mercedes y sobre todo Ferrari.
A su vez, esta podría ser la carta ganadora de
McLaren, donde Button con un coche que ya cuida de por sí lo neumáticos, podría
adaptarse a la perfección y repetir victoria como ya hizo en 2009 y 2010. En
cuanto a lo pole, el candidato número 1 es Vettel, pues el McLaren no ha sido
demasiado rápido a una vuelta en pretemporada. Eso sí, nunca hay que descartar
a Lewis Hamilton. La cosa debería estar entre ellos dos. Luego, la carrera.
será harina de otro costal, y debido a la aparente igualdad que existe, no se
esperan cabalgadas en solitario como las perpetradas por ‘Seb’ el año pasado.
El espectáculo que nos espera es colosal. Para completar el podio, creo que hay
que con Fernando Alonso sin lugar a dudas.
Como vimos el año pasado, si las temperaturas en
Australia bajan -se esperan unos 20 ºC de media- el equilibrio se vuelve
complicado, y el SC puede hacer su aparición cuando menos te lo esperas. Este
año, la nueva normativa de SC, obliga a los doblados a desdoblarse para
permitir el espectáculo y la lucha por posición en carrera después de la
reanudación.
El año pasado ganó Vettel con la clásica carrera a dos
paradas, aunque algunos como Alonso, Webber o Button hicieran tres, intentando
hacer algo diferente a lo que hizo la gente que acabó en el podio. Pero no
funcionó. El cajón lo completaron Hamilton, y un sorprendente Petrov en su
Lotus Renault. ¿Podríamos sumar a la fiesta este año a Kimi? Por supuesto que
sí, al equipo de Estone se le da bien este circuito, ganó en 2005 y 2006, junto
con el podio del año pasado. En cuanto a las paradas, esperamos tener para la
mayoría de pilotos dos o tres paradas pero una amplitud estratégica muy amplia.
Controlar lo incontrolable

Así que una vez más se acerca el momento, se tensan los músculos, el
corazón se acelera, y la cabeza está pendiente de cada movimiento, de cada
noticia, de cada comunicado de los equipos, o de la polémica de turno. Así es
la F1. Da igual si
tenemos un piloto preferido, o una escudería, la pasión de la F1 arranca este
viernes, y estoy seguro de que cualquier piloto está deseando lanzarse a esa
primera curva y conducir lo más rápido que pueda, porque la velocidad es este
deporte lo es todo.
Creo que
tenemos que desterrar esa obsesión por las victorias o derrotas de un piloto, porque
ni él mismo está tan obsesionado como alguno de sus seguidores. Viendo “Dias de
Trueno” el otro día lo vi claro. Una guapísima Nicole Kidman le pregunta al
sempiterno Tom Cruise: “¿por qué te gusta correr?” A lo que el piloto
responde: “me
gusta controlar la velocidad, saber que soy capaz de controlar algo incontrolable”
Nadie está en F1 para ganar nada, eso es algo
secundario, que viene después o no, está para conducir los coches más rápidos
del mundo, para disfrutar de esa tremenda sensación. Viendo lo sonriente que
estaba Fernando Alonso en los tests, se entiende mucho mejor. Él está aquí por
la velocidad, puede que gane o no, pero para él controlar lo incontrolable lo
es todo. Velocidad y pasión. Fuerza y Honor. Australia ya está aquí. De nuevo
en la Brecha, amigos míos…
“Se oye el runrún de los tambores, la fuerza de las
fanfarrias.
El izar de banderas, y pendones, el vibrar de las
corazas.
Cascos al viento, lanzas, escudos y más lanzas.
Campos de gomas y ruedas, listos para las batallas.
¡A las trincheras!, sólo el semáforo espera las señas…
“
grande mag... que buen articulo.. poetico.... muy muy bueno.. por eso un fiel seguidor de tu trabajo....
ResponderEliminarsaludos desde venezula.. Carlos Ollarves
Gran regreso MAG. Es obvio que Ferrari esconde algo, ya veremos si es suficiente.
ResponderEliminarMenos mal que habéis vueltooo! Solo espero que el cargamento de Red Bull Cola os de para escribir toda la temporada.
ResponderEliminarNo hay más que decir:
Máximo, Máximo, MÁXIMO, MÁXIMO, MÁXIMO,MÁXIMO, MÁXIMO,MÁXIMO, MÁXIMO,
Gran previo MAG. Ya hacia tiempo que no leia uno tan bueno, felicidades.
ResponderEliminarUn cordial saludo
Gracias, Carlos. Esta temporada seguiremos al pie del cañon... Un saludo desde España para Venezuela. Ya se que eres uno de mis fervientes seguidores...
ResponderEliminarGeacias, Cesáreo. Como dices tú, parece que esconden algo. Pat Fry ha llegadoa última hora con piezas nuevas frescas para probar el Viernes, si es que n o llueve, claro.
Gracias, fCasero. Hemos vuelto, y lo hemos hecho para quedarnos...jejeje Atentos a los 10 magdamientos del luenes que van a ser la bomba...
Como siempre, FA, un placer. Esperemos que estemos mejor de lo que nos ponen los alemanes que vaticinan que Ferrari no va a Entrar ni en los puntos....Odían mñas ellos a Fernando que los españoles a Vettel...jajajaj
Gracias C